martes, 5 de octubre de 2010

Ya lo decía mi madre: - ¡Hija,que teatrera eres!

Ha sido raro, muy raro, oír aplausos que no veía... Que se acercara gente con la que ni siquiera había hablado, y me arropara de esa forma... Sería la fiebre, sería la emoción, o que habíamos roto el hielo y nos habíamos atrevido a ser las primeras... Será que pese a ser prácticamente unos extraños, les buscaba con la mirada, me sonreían, y me sentía mucho más tranquila.... O que al terminar, su crítica estaba siendo pelín dura, pero nuestro esfuerzo y sobre todo la espontaneidad eran mucho mayores... o que la gente se ha reído con las tonterías que mi cabeza decía fruto de los nervios ( Estoy en mitad escena de la improvisacion, mala con fiebre y el foco dándome directamente, no lo soporto más - Oye que calor hace en esta puta casa ¿no?... Aprovecho para beber y abanicarme un poco //  Compi hace como que se pone muy nerviosa y que le tiemblan las manos: - A mi no me hagas teatritos, que esto no es uno de tus cortos... // Compi me mira raro, como si se le acabara de ocurrir una idea -¿Que te pasa en la cara? ¿por que me miras así de raro? //  Compi intenta convencerme con chantajes emocionales,  pero yo no dudo- ¿Vas a tirar todo el trabajo de medio año de tu hermana por la borda?- Sí! Obvio ) No lo sé, pero fuera lo que fuera, han sido tan gratificantes las palabras de todo el mundo que se acercaba luego con una sonrisa, y gestos y palabras de aprobación  (incluso con un caramelo para mi garganta enferma) tanto como el abrazo que alguien me ha regalado después... Y sí, era un regalo porque no lo esperaba, y porque ni siquiera sé cuantos años tiene o cual es su apellido, pero era justo lo que necesitaba.

No estaba entre mis planes lo de actuar... pero ¡oye! dicen que tengo madera (en la cabeza) No sé, yo me lo he tomado como un juego, no como algo serio, supongo que eso ha hecho que me relajara tanto, que haya visto la famosa 4ª pared, ni idea.... pero estaba realmente cómoda... Eso sí, ceñirme a algo escrito sería completamente diferente a lo de hoy, a mí me va más lo de improvisar, lo de ser un poco yo dentro del personaje y decir lo que diría si estuviera exactamente a la misma altura que esas otras 30 personas más, así a nivel del mismo suelo... Por lo que pese a todo, me temo que no, que no cuenten conmigo para la obra final y real...  jajaja máma mia aun no he llegado y ya estoy exigiendo.... ¡¡¡que no insistan más por dios que no pienso actuar!!! (modo dramático off)

Me ha encantado, la verdad, estaba nerviosa tirando a insoportable, pero eso ha sido bueno, porque eso saca mi lado "verborreico" que hace imposible que me calle, e incluso tenga hasta respuestas ocurrentes. Quería probarlo, y aunque me moría de miedo, la curiosidad iba un paso por delante, y ya estaba matándome. Comprobado: valdría. Así que ya puedo retirarme tranquila... Ya he tocado la cúspide de interpretación, asi que ya puedo bajar jajajajaajajajajaja

Ahora en serio, he tenido más satisfacciones en dos días, he recibido más palabras bonitas  (desconocidas y de desconocidos) y me he sentido más orgullosa de mí en un triste Lunes de grabar noticias y un simple Martes de interpretar conflictos, que en el resto de años... Sigue sin ser mi sitio, o bueno ya no lo sé, sigo quedándome callada cuando hablan demasiado de cine de autor entre cafés, o de cómo la señal llega a los televisores línea por línea, formando campos y cuadros y toda la mierda que quieran... Pero me gusta aprender, y de ésto no sé nada... Soy una suertuda... He descubierto algo bueno por una vez, me faltan todo tipo de conocimientos, y también de técnica, pero tengo carisma de sobra para que no se note, o para todo lo contrario, para que lo sepa todo el mundo, y podernos reír de ello... o para que se acerque un profesor, el de teatro y también el de narrativa, justo ese al que a todo lo que pregunta, contesto: - No... - No he visto esa película, no conozco ese director, no he hecho ningún papel en ninguna obra (de pequeña era narrador o árbol jajaja) no sé que pasaba en América en ese año, no leo revistas de cine, apenas voy al teatro (sólo si soy invitada jiji), pues él y no otro me haya dicho hoy: - Pero... si no puedes compaginar las dos cosas ¿que harás?... no irás a dejarnos, ¿no? No te vayas, mujer... -  Y ahí me he dado cuenta del tiempo que hacía que alguien no me pedía que me quedara en algún sitio...     Lo reconozco, soy fácil, me han ganado un poco con halagos estos días, he empezado a sentirme un poco parte de algo, e incluso diría, que he empezado y me han empezado a coger cariño algunos alguien. No esperaba que fuera a hacer esto bien, ni siquiera que de que así fuera, me alegrara tanto. Ha sido toda una sorpresa y un descubrimiento para mí... Aún recuerdo la primera vez que alguien me dijo lo guapa que estaba, guapa de verdad, no por decir... y cuando esa misma noche, otro alguien también lo vio, y otro y también otro... ¿Que qué hice? Me puse a llorar como la niña que era, cogí un sofoco de los importantes... Era un viaje de fin de curso, y supongo que estaba tan poco acostumbrada a recibir halagos como lo sigo estando ahora.... Hubo un tiempo, muchos meses, en que cuando alguna persona que vivió aquel viaje conmigo, oía que alguien me decía que estaba muy guapa, enseguida saltaba: - No, calla, no le digas que está guapa que llora...de verdad- Ahora ya lo he superado, y trato de asimilarlo...jajajaja...  Imagino que no es tan malo, es bonito que pequeños gestos o palabras sigan emocionándome, aunque sea por falta de ellos. (Se comprenderá ahora, que tanto elogio, en clases diferentes, vineindo de personas diferentes, hacia mi persona, y sin tener porqué deicrme nadie nada, siendo que todos estamos haciendo lo mismo y  que  yo por ejmplo, no me he dado cuenta si alguien ha destacado en algo o no,,, pues me desconcierta y asombra y ya no lloro, porque no tengo edad, pero sigue emocionándome igualmente)

Ahora sé, que si dejo ésto, no será una huida, será una decisión que tomaré por lo que sea, pero no un "no me veo capaz" porque a veces, en días como hoy, me siento orgullosa de mí, y como eso es algo que siento poquitas veces, quiero escribirlo para recordarlo en un futuro. Me dice una compi, la actriz de teatro, la que dice que tengo madera y voz bonita (no, no me ha oído afónica aún) que cuando algo pica, hay que rascar... Y no hay nada más cierto... Aquí estoy yo, rascando desde hace 3 semanas, probando, jugando, aprendiendo... Me gusta haberme enfrentado a este "pánico escénico" a mi vida, me gusta haberme visto allí arriba pero sentada desde la primera fila de butacas, me gusta haber ayudado a quién he podido... Me gusta estar conociéndome un poquito más, a  la vez que lo hacen otros... Y conocerles a ellos, cada uno con sus rarezas y motivaciones, cada uno con su historia, con su vida, gente de 17 a 42 años... no podemos ser más diferentes, no puede haber mas variedad ahí dentro, y me encanta. Me gusta la facilidad con la que ven y dicen cosas buenas del resto, y la amabilidad y entusiasmo que tienen la mayoría.

Gracias.

Si me voy, echaría de menos el llegar a conocerles de verdad.

Igual no existe un sitio para cada uno de nosotros, igual se trata sólo de ser capaces de creárnoslo... y creérnoslo.

1 comentario:

  1. Yo soy de las que opinan que hay que intentar conseguir esos sueños que le rondan en la cabeza a una, ya sean vivencias o pequeñas locuras.

    Ya "leo" que te has lanzado a alguno de ellos, me alegro. Al menos ahora no podrás decir eso de "no lo intenté".
    Y siéntete orgullosa, ya solo por atreverte a cambiar de camino como tantas veces hemos "hablado-escrito" por éstos mundos blogueros ;)

    Un besote corazón!

    ResponderEliminar

Me gustaría decirte que